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Promueven la adquisición de habilidades conductuales y sociales con el juego de palabras

De acuerdo con el CPTSPR, utilizar este tipo de dinámica estimula la atención, concentración y agilidad mental

Los niños se pueden poner a hacer garabatos para drenar ante la vivencia de un tiroteo.
Promueven la adquisición de habilidades conductuales y sociales con el juego de palabras (Archivo)

En el Día Internacional del Juego, el Colegio Profesional de Trabajo Social de Puerto Rico (CPTSPR) compartió una serie de recomendaciones para desarrollar habilidades motoras, comunicativas, sociales, emocionales y conductuales a través del juego con las palabras.

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Según la organización, al utilizar este tipo de dinámica, se estimula la atención, concentración y agilidad mental. También, se estrechan los vínculos al facilitar la interacción y el encuentro con otras personas.

El CPTSPR destacó que se pueden llevar a cabo diversas actividades lúdicas que involucran letras como rimas, adivinanzas, trabalenguas, paradojas y cuentos para aumentar la adquisición de vocabulario y su uso.

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A continuación, se presentan algunos juegos de palabras que se pueden practicar en familia:

  • Adivinanzas: Las adivinanzas son acertijos y se formulan en forma de rima. Estos promueven la asociación de ideas y palabras, aumentan el vocabulario, facilitan el pensamiento abstracto y la diversión en la población infantil y juvenil. Un ejemplo es el tradicional juego del “Veo, Veo”, que mediante la observación, identificamos un objeto y ofrecemos como clave la primera letra del objeto que deseamos identificar. Se pueden ofrecer pistas para identificar el objeto.
  • Retahílas: Las retahílas son grupos de palabras típicamente cortas. Estas cuentan una historia con versos que riman. Se entonan como canción o poema. Este juego de palabras promueve la fluidez verbal, atención y memoria. A través de las repeticiones, rimas y armonía se divierten y aprenden. Hay diferentes tipos de retahílas: sorteos, pedir prenda, calmar, para quedarse con lo encontrado, entre otras. Aquí algunos ejemplos:“De tin marín de dos pingüé, cúcara, mácara, títere fue”, “Sana, sana colita de rana si no sanas hoy, sanarás mañana” y “Palomita blanca palomita azul todo lo digas lo eres tú”.
  • “Stop”: Consiste en establecer temáticas como: nombre, fruta, país, pueblo, color, y cualquier otra que se acuerde entre las personas que constituyen el grupo. Luego cada integrante dibuja una tabla en un papel y la divide en columnas de acuerdo con el número de temáticas seleccionadas. Deberá incluir una columna final, para anotar las puntuaciones obtenidas. Se escogerá una letra del abecedario (como también puedes hacerlo tipo sorteo). Las personas del grupo completarán la tabla con palabras que comiencen con la letra seleccionada. La primera persona en completar las columnas dirá en voz alta la palabra “stop”. Esto paraliza el juego. Se intercambian respuestas entre las personas. Estas obtendrán diez puntos por respuesta no repetida y cinco puntos para respuestas repetidas. Se suman las respuestas en la columna de puntuación, para finalizar el juego.
  • La frase interminable: Es una manera divertida de contar una historia colectiva o una frase. Una persona comienza diciendo una palabra. Aquella persona que está a su lado la repetirá y le añadirá una propia y así sucesivamente hasta formar una historia o una frase interminable. Al sumar las palabras, cada vez se hará más difícil recordarlas todas.

Es importante acoplar el juego a la edad, a los intereses y al nivel de desarrollo. Las actividades de juego que así lo requieran deben ser modificadas para propiciar su participación y la inclusión.

Para más información sobre este tema, puede comunicarse al (787)-768-5700 o visitar la red social de Facebook: Colegio de Profesionales del Trabajo Social de Puerto Rico.

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