Sigue este sistema y pon orden en tu casa.
1. Ordena iguales por iguales
Agrupa los objetos en categorías similares. Escoge el espacio o la habitación que deseas ordenar. Saca todos los artículos, si por ejemplo es tu clóset, pon todo los pantalones juntos, las playeras en otro montón y sigue esa dinámica. De esta forma te darás cuenta de lo que tienes, la cantidad de artículos, tus hábitos de consumo o si te hace falta algo o tienes de más.
2. Reduce
Para reducir tienes que preguntarte sinceramente si esa prenda o artículo lo usas, si todavía te queda o si aún es adecuada para ti. Este es el momento de la reflexión donde decidirás lo que deseas conservar. Este paso también lo puedes hacer con los niños, ya que así les enseñarás a organizar y cómo ordenar sus cosas.
Aquí también decidirás sobre el destino de cada objeto (se queda, donación, reciclaje, regresar, basura o venta). Al momento de ir sacando cosas, ten varias bolsas a la mano para depositar ahí lo que deseches y darles un nuevo rumbo.
3. Da un lugar
Acomoda cada categoría en el mejor lugar considerando frecuencia de uso, volumen y funcionalidad. Pregúntate: ¿con qué frecuencia lo uso?, ¿necesita estar a la vista? y ¿es de fácil el acceso para quien lo usa? Después busca el lugar ideal para cada una y empieza a darle un orden. Cuando ordenas un espacio es más probable que las cosas regresen a su lugar, ya que así los demás miembros de la familia sabrán dónde están y tus espacios se empezarán a ver más organizados.
4. Etiqueta el contenedor ideal
Encuentra el contenedor ideal y etiquétalo para identificar fácilmente su contenido. Sobre el contenedor pregúntate: ¿me funciona?, ¿me gusta?, ¿va con el estilo de mi espacio? y ¿tiene espacio suficiente para el contenido? Aquí la parte visual en los accesorios es muy importante, por ejemplo puedes utilizar ganchos de un solo color en tu clóset que te permitan mantener la ropa en buenas condiciones y también puedes checar videos de cómo doblar las diferentes prendas para que aprendas a acomodarlas mejor.
5. No recaigas
Crea un plan de mantenimiento y síguelo para que el orden prevalezca. Toma conciencia de todo el trabajo y el tiempo que te implicó acomodar. Cuando abras tu clóset o veas ese espacio bien ordenado la paz vendrá a ti y te sentirás libre de todo estrés, además encontrarás las cosas más fácilmente y tendrás más tiempo para ti y los tuyos.
Tips extra
Ya que tengas tu ropa ordenada en tu clóset, imprégnala de aromas nuevos y agradables, para ello los expertos de Downy nos dicen cómo escoger un buen suavizante.
• Actualmente hay suavizantes hechos con fórmulas especiales que tienen cápsulas de perfume que se activan con el movimiento, ayudándote a liberar el perfume mientras la estás usando, el icónico rubbing effect, que deja en tu ropa una sensación de frescura superior que perdura en presencia de malos olores internos y externos aún después de varios días de lavada.
• Busca uno que te ayude a retardar la formación de pelusas y bolitas, lo cual mejorará la apariencia de tus prendas, también hará que la ropa se sienta y luzca suave combatiendo las arrugas y facilitando el planchado.
• Cuida el ambiente y escoge aquellos que sean de libre enjuague para reducir el uso de agua durante el lavado.