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Cuando recordar “los buenos momentos” no es suficiente

La Tanatología es una ciencia integral que se ocupa del cuerpo, la mente, la emoción y el alma del ser humano.

“Recuerda los buenos momentos que vivieron juntos”. Con frecuencia escuchamos esta proposición para reconfortar a las personas que sufren la pérdida de un ser querido. Aunque en parte esto podría ayudar en el proceso de duelo, “las palabras de aliento” no son suficientes.

Así lo explicó la tanatóloga, Shirley Silva, fundadora de la Asociación de Tanatología Integral de Puerto Rico y el Caribe, Inc., y tanatóloga del Hospital de Trauma de la Administración de Servicios Médicos (ASEM), quien se esfuerza para que la Tanatología sea reglamentada en Puerto Rico para mitigar la falsa de representación de la profesión y proteger la seguridad pública, entre otros aspectos.

La experta aclaró que la Tanatología es el estudio, especialización o sub-especialización en el campo de la muerte, el morir y las pérdidas significativas que realiza el profesional de las áreas relacionadas a la salud, medicina, conducta humana, educación, ciencias mortuorias, consejería, policía (criminología), las artes, letras y filosofía, comunicaciones, relaciones públicas, espiritualidad, leyes y terapias complementarias.

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Su aspecto principal de práctica clínica se describe como Ciencia y Rama de la Salud que estudia, investiga, analiza, e interviene en el proceso y manejo del evento muerte desde el diagnóstico de una enfermedad terminal o muerte inesperada (súbita, traumática) hasta el duelo en sus diferentes manifestaciones individuales y socioculturales.

“Las palabras no obran de manera mágica porque la Tanatología inspira a los dolientes o sobrevivientes a que hagan un trabajo con ellos mismos. A través de la Tanatología estas personas están llamadas a tener una responsabilidad con su cuidado propio y a ejercitarse de una manera que la Tanatología les puede enseñar”, exhortó la precursora de la Tanatología a nivel profesional en la isla.

En ese sentido explicó además que hay que ejercitarse mentalmente, emocionalmente, de forma espiritual y físicamente para enfrentar las pérdidas significativas.

“A nivel físico el doliente debe descansar y no abandonar su régimen de tratamientos. A veces pensamos que mientras más nos abandonemos porque me duele que mi ser querido ya no esté, eso significa más amor. Y la realidad es que el amor es más grande en la medida que nos cuidemos más. Estoy bien segura que lo menos que quieren nuestros seres queridos que han muerto es que nosotros llamemos a la muerte también porque no nos querernos cuidar y seguir en el círculo del sufrimiento interminable”, destacó.

“Hay teóricos que proponen que el duelo no termina nunca y hay otros que piensan que sí. Mientras que hay otros que dicen que se puede aprender a vivir con la pérdida, y yo digo que lo más saludable es aprender a amar la ausencia como modo de presencia. Es una ausencia que va a estar presente, pero en nombre del amor que le hemos tenido a los seres queridos que han trascendido, debemos seguir adelante y buscar todas las ayudas necesarias para continuar viviendo con calidad de vida”, abundó.

De acuerdo con Silva, la Tanatología no solo se convierte en un proceso educativo sino también es una herramienta creativa y de inspiración para mejorar la calidad de la existencia.

“La Tanatología se convierte en una representación de lo que es una salud integral. Es por esto que esta semana destacamos la función que hemos tenido de educar a la sociedad sobre la Tanatología y qué cosas especiales podemos hacer… porque no solo es la práctica clínica sino el proceso educativo de investigación y aspectos administrativos. Nuestros profesionales de la salud necesitan educarse también sobre la conciencia de la finitud y sobre el mejor manejo de las pérdidas contundentes y significativas”, enfatizó la profesora y coordinadora de los Certificados Profesionales en Tanatología de los Recintos de Río Piedras y de la Escuela de Profesiones de la Salud del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico.

Durante el día de hoy y mañana (jueves 23 de marzo y viernes 24 de marzo de 2023), se ofrecerán una serie de conferencias sobre la Tanatología como profesión centradas en los temas de la muerte, el morir, el duelo y las pérdidas significativas. Las mismas se llevarán a cabo en la biblioteca Conrado F. Asenjo, del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico.

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